Buenos Aires.- Luego de que se conociera que el nivel de desempleo llegó a 9.3 %, el Gobierno aceleró los preparativos de un nuevo plan de reforma laboral con el objetivo de facilitar a las empresas la contratación de nuevos empleados, por períodos de tiempo cortos y con procedimientos de desvinculación sencillos, es decir, un proyecto de flexibilización laboral.
Según publicó Carlos Burgueño en Ámbito Financiero, la iniciativa de una nueva reforma laboral ya existía, pero se aceleró a partir de la difusión de los niveles de desempleo. Se pretende anunciar el proyecto como una solución a ese panorama. Uno de los principales desafíos de la nueva propuesta de flexibilización será que no destruya el vínculo con la flamante conducción tripartita de la CGT. Además, para ser aprobada por ley debería sumar avales en el Congreso, donde es de esperar que genere una oleada de críticas opositoras.
Los principales puntos sobre los que giraría la norma apuntan al empleo entre los 18 y los 24 años –el sector más afectado por la desocupación- y a instalar la posibilidad de permitir negociaciones paritarias descentralizadas y por empresa. La propuesta remite indefectiblemente a la llamada “Ley Banelco”, emblemática del primer año de gestión de Fernando de la Rúa y lo que vino después
