Caba.- Al igual que su estrategia parlamentaria en el 2024, el Gobierno volvió a apostar por mesas de diálogo con representantes legislativos de sus bloques más cercanos antes de iniciar las sesiones extraordinarias en el Congreso. Esta vez fue con presidentes de los aliados del Senado, con la participación de Guillermo Francos y Victoria Villarruel. En el encuentro se repasaron los proyectos que integran el temario de las extraordinarias, con la particularidad que no hubo prioridad específicamente en las dos iniciativas que le corresponden al Senado: ley Antimafia y pliegos para la Corte Suprema de Justicia. «Se habló del tema por arriba, pero se nota que el Gobierno está buscando consensos. De todas formas, es imprescindible la presencia del bloque peronista para tener definiciones», señaló uno de los presentes, al respecto de la designación de Ariel Lijo y Manuel García Mansilla. «Se acercaron posiciones; se comentó cuál es el plan y la prioridad del Gobierno. Se estableció qué se va a trabajar a partir de lo que defina Diputados que es por donde entraron los proyectos más importantes«, remarcaron desde el entorno de Villarruel, quien en el Senado ocupa un rol negociador tan activo como el de Francos.