El Consejo Directivo de la CGT anunció que el lunes hará un paro general a partir de las 12, dos horas antes de que comience la sesión en la que se tratará la reforma previsional tras el acuerdo de la Casa Rosada con los gobernadores.
La medida de fuerza se suma a la ya anunciada por las dos CTA, quienes también marcharan junto con movimientos sociales, centros de jubilados, partidos opositores, el Movimiento Evita y la Confederación de Trabajadores de la Economía Popular (CTEP). También participarán la Corriente Clasista y Combativa (CCC), el movimiento Barrios de Pie, a través de su coordinador nacional Daniel Menéndez y el Frente por el Trabajo y la Dignidad Milagro Sala, cuyos militantes se congregarán al mediodía en el cruce de las avenidas 9 de Julio y de Mayo. Mientras que el kirchnerismo se manifestarán a partir de las 13 en el Congreso, bajo la consigna “Unidos en la calle y en el Congreso Nacional”.
Antes de que se definiese el paro, uno de los triunviros, Carlos Acuña, aseguró que desde la CGT” hemos acompañado, tratando de no poner piedras en el camino, pero creo que la situación no da para más”. “Si la ley sale como quiere el Gobierno, va a haber un paro general a partir del mismo día lunes”, había anticipado Acuña, aunque la presión de las bases obligó a la mesa directiva a tomar la medida de fuerzas.
La reforma de ley, si sale como pretende el oficialismo y a la que Mauricio Macri le agregaría por Decreto el bono, tal como busca el oficialismo, el mismo costará apenas 4.000 millones de pesos; de los cerca de 90.000 millones que implican el recorte.
EL mismo se pagaría por única vez, en un esquema similar a lo que eran los bonos de fin de año que este año no habrá y serán para los beneficiarios de la AUH recibirán de $ 400; mientras que para jubilados que cobren menos de $10.000 y hayan ingresado por moratoria $ 375, y quienes han cumplido todos los años de aporte de $750. Así, con este esquema, cada jubilado que cobre la mínima, perdería respecto a la fórmula actual de actualización más de 4 mil pesos a lo largo de todo el 2018
Ante ese panorama, desde la oposición ya salieron a rechazar el cambio en la reforma y la consideraron una limosna. “La explicación del Gobierno es falsa. Lo que quieren es compartir el costo de la medida política con otros dirigentes”, afirmó la titular del bloque del Frente Renovador, Graciela Camaño, quien anticipó que Macri “sigue cometiendo imprudencias enormes en el gasto público” y adelantó que van a “entrar si el oficialismo logra el quorum, y después vamos a votar en contra”.
“Es una limosna, porque no resuelve el desfasaje” del pase de una fórmula de movilidad a otra, sentenció la diputada massista.
Por su parte, el presidente del bloque FPV, Agustín Rossi, aseguró que “lo del bono es un engaña-pichanga, para conseguir quórum”. “Es una farsa”, afirmó el santafesino, quien sostuvo que los los diputados de Argentina Federal están sumamente extorsionados. Ahora dan el caramelito del bono que no soluciona nada”.