En la sesión del jueves 27 de septiembre fue aprobada por mayoría en el Concejo Deliberante, la interpelación del Intendente Horacio Tellechea para el próximo viernes5, alas 19 Hs., por supuestas irregularidades en la adquisición de aparatología para el Hospital Municipal Dr. Emilio Ferreyra,
Esta medida se pudo concretar después de una investigación desarrollada por los ediles radicales quienes impulsaban la constitución de una comisión investigadora pero ante el pedido de los concejales de Unión Peronista de realizar, como paso previo, una interpelación se apoyó esta iniciativa junto al bloque de Unidad Socialista.
Además, se requirió al Departamento Ejecutivo a poner a disposición el expediente 504/12 o copia certificada, en un término “perentorio e improrrogable de 24 horas”.
Más de dos horas de debate consumió este tema durante la sesión, la cual se desarrolló con normalidad, siendo seguida por numerosos funcionarios, así como también por militantes de los restantes partidos de la oposición.
El edil radical Alberto Esnaola se refirió concretamente en los distintos aspectos que se relacionan con los equipos, enfatizando que “con todo esto no gana nadie, sino que perdemos todos”, para luego afirmar que “se ha demostrado que se libraron pagos sin la contraprestación correspondiente”.
Agregó que, “esto está prohibido porla Ley OrgánicaMunicipal y el Reglamento de Contabilidad”, a la vez que brindó precisiones sobre la investigación que llevó adelante el bloque al que pertenece.
En tanto el edil Gonzalo Diez negó que el único objetivo sea “poner palos en la rueda” al oficialismo.
Al respecto, enumeró lo que a su juicio fueron los principales desaciertos de la gestión de Tellechea, aunque también aludió a los barras bravas que estuvieron en las elecciones de octubre de 2011, criticó la falta de pago al ex intendente Daniel Molina y a los ex funcionarios, a los incidentes en el Festival Infantil, a lo sucedido con el presupuesto y al desconocimiento de la ordenanza que regula el horario del Bingo, entre otros temas.
Esnaola destacó que “se pagó por un Arco en C (unos 500 mil pesos) cuando éste no fue entregado; hubo sobreprecio en los carros y tampoco aparecieron todos, a lo que se debe sumar que en el área de Patrimonio no constaba nada”.
La existencia del misterioso expediente fue otro de los aspectos que motivó los cuestionamientos de la oposición, marcándose las contradicciones entre las Secretarías de Salud y de Gobierno, cuando se consultaba por la documentación que en ningún momento estuvo en manos de los concejales, así como tampoco se les dio vista.
Anteriormente el concejal Pablo Aued, reivindicó la potestad del cuerpo para ejercer el control de los actos del Departamento Ejecutivo, al cual fustigó severamente en varias oportunidades por interpretar que desconoce al Concejo Deliberante, al tiempo que recordó la falta de puesta en marcha de determinadas ordenanzas y la negativa a contestar las minutas de comunicación.
En Unión Peronista, tanto Arturo Rojas como Alejandro Issin coincidieron en que “si no hay nada que ocultar debe esclarecerse esta cuestión”, considerándose que el municipio “no puede manejarse como un club de amigos”.