VIDAL, LAS DECISIONES INTERINAS Y SU AFINIDAD CON MOYANO Y VENEGAS.

OPINIÒN.-José Luis Vidal asumió hace 16 meses al frente del gobierno municipal de Necochea, debido a la destitución impuesta por el Concejo Deliberante a Horacio Tellechea. Por esa razón le corresponde la figura de Intendente Interino, porque si bien Vidal es el 1º Concejal de la lista que acompañara a Tellechea y se cumple con la ley, el hombre no ha sido votado para Intendente, hasta acá lo convierte en legal pero ¿es legítimo?
Si tenemos en cuenta que en octubre de 2013 Vidal se involucró fuertemente en la campaña y el Frente para la Victoria resultó 3º con el 10 % de los votos, hoy la pregunta sería si Vidal debería toma decisiones tan importantes como la adhesión a la Policía Comunal, la concesión de la Playa Municipal de Camiones, el llamado a licitación por la recolección de residuos, cuyo contrato se vence a fin de año, así como otros temas que ameritan del apoyo que solo lo dan los votos de la gente.

¿VISITA DE CORTESÌA?

Hace unos días visitó al Intendente (I) Vidal, una comisión del Sindicato de Choferes de Camiones, nivel nacional, encabezada por el Secretario Gremial, Marcelo Aparicio, quien al término de la reunión con el jefe comunal, expresó jubiloso, “teníamos inquietudes, el 1º punto, por el servicio de recolección, sabiendo que en diciembre vence la licitación y queríamos tener la seguridad que los trabajadores puedan continuar en los puestos de trabajo y el Intendente nos dio la “tranquilidad” que va a llamarse a licitación nuevamente y otro punto es el chiquero que va a enviar al Concejo un proyecto para concesionarlo”, señaló eufórico el dirigente. Acaso podríamos estar en la víspera de un nuevo intento de Covelia de hacerse del servicio de recolección.
Así las cosas, no deberíamos pasar por alto el “acompañamiento” por parte del Bloque de Unión Peronista-Fe, hacia el gobierno interino de Vidal, por momentos hasta parecen lo mismo, a pesar del maltrato que le prodigan al gobierno nacional los ediles de “Fe”, en línea con su jefe Gerònimo Venegas, quien además mantiene una estrecha relación con el líder camionero Hugo Moyano.
En el mismo sentido, hoy avanza el proyecto de iniciativa privada para la explotación de la playa de camiones, sobre la cual Vidal ha dicho que el estado municipal no puede administrar, pero le genera al municipio ocho millones de pesos al año, en un momento que el dinero no le alcanza para brindar los servicios esenciales. También en este caso, el Sindicato de Moyano forma parte del grupo que pretende quedarse con el lugar.
Mirándolo desde el punto de vista ideológico, no sorprende la actitud privatizadora de Moyano y Venegas, pero si la del Frente para la Victoria, que ha demostrado que es el estado quien debe brindar los servicios públicos.

EL ESTILO MOYANO PARA IMPONER A COVELIA S.A. Crónica de una vuelta anunciada.
Vale la pena repasar la historia reciente, compararla con nuestros días y la visita de los enviados de Moyano.
“El 9 de noviembre de 2006, la ciudad de Necochea olía mal, los trabajadores de la empresa encargada de la recolección de residuos, Servicios Ambientales, estaban de paro desde hacía días, la basura se amontonaba en las calles y Pablo Moyano llegó con la solución: Covelia S.A. ofrecía hacerse cargo del servicio e incorporaba a los trabajadores de Servicios Ambientales respetándoles, incluso, su antigüedad. «El intendente [radical, Daniel] Molina se reunirá hoy con los responsables de una empresa de la Capital Federal que podría hacerse cargo del servicio y estaría dispuesta a traer camiones nuevos», dijo Pablo Moyano a los medios locales, en un rol más de empresario lobbista que de gremialista y desconociendo la decisión del Concejo Deliberante frente a estos temas. El problema fue que la propuesta de Covelia era del doble de lo que cobraba Servicios Ambientales y al municipio, a pesar de las presiones, no le quedó otra alternativa que rechazarla. «No había forma de que afrontáramos ese costo con nuestro presupuesto», explicó una fuente comunal. Lo cierto es que el conflicto se saldó tras un llamado de Hugo Moyano a su hijo para que «levantara el pie del acelerador».